La creatina es uno de los suplementos más populares entre los deportistas. La creatina es un compuesto natural que se produce en el organismo a partir de aminoácidos, aunque también puede encontrarse en alimentos, como la carne roja y algunos pescados. La creatina se encuentra principalmente en los músculos, donde desempeña un papel esencial en la producción de energía para los mismos.
La suplementación con creatina aumenta la cantidad de esta sustancia en el cuerpo hasta en un 30%. Hay muchos tipos diferentes de creatina disponibles en el mercado, pero la forma más simple y barata es el mono hidrato de creatina. La creatina es uno de los suplementos más investigados, y es segura para las personas sanas.
La suplementación correcta de creatina puede ayudar a aumentar la masa muscular y la fuerza durante el entrenamiento de resistencia, así como mejorar el rendimiento en competencias. También es beneficiosa en deportes que implican ejercicio intermitente de alta intensidad, y se ha demostrado que mejora el rendimiento en pruebas como la velocidad de sprint repetido y la altura de salto.
La creatina tiene algunos efectos secundarios, el más común es el aumento de peso, que se produce a causa de la retención de agua en los músculos. Este efecto secundario varía, y no todas las personas lo experimentan, aunque es habitual ganar de 1 a 3 kilos. En ocasiones, la creatina provoca molestias estomacales leves en algunas personas que toman grandes dosis. Sin embargo, los estudios no muestran efectos secundarios más graves como un mayor riesgo de lesiones, deshidratación, disfunción renal o malestar estomacal.
Nunca tomes suplementos ni medicamentos sin antes consultar a tu médico.
