El páncreas es un órgano vital que produce enzimas digestivas y hormonas que regulan el azúcar en sangre. La pancreatitis es una inflamación del páncreas, que puede tener un impacto significativo en la salud de una persona.
Hay dos tipos principales de pancreatitis:
Pancreatitis aguda: inflamación repentina del páncreas que suele durar unos días, frecuentemente es causada por cálculos biliares o consumo de alcohol y puede provocar dolor abdominal intenso, náuseas y vómitos.
Pancreatitis crónica: inflamación prolongada del páncreas que puede dañar el órgano y provocar una pérdida permanente de su función. A menudo se debe al abuso de alcohol y puede causar dolor crónico, pérdida de peso y diabetes.
También factores como tener niveles elevados de triglicéridos en la sangre, ciertos medicamentos, trastornos autoinmunes, infecciones y traumatismos pueden causar pancreatitis.
El síntoma más común de pancreatitis es el dolor abdominal, que generalmente se localiza en la parte superior del abdomen y puede irradiarse hacia la espalda. Otros síntomas son náuseas, fiebre, pérdida del apetito, diarrea, piel y ojos amarillos (ictericia).
El tratamiento de la pancreatitis dependerá de su gravedad; los casos leves pueden tratarse en casa con medicamentos, pero los casos más graves pueden requerir hospitalización y tratamiento con antibióticos intravenosos, analgésicos y otras medidas de apoyo. En algunos casos, puede ser necesaria una cirugía para extirpar los cálculos biliares.
Para prevenir la pancreatitis, mantén un estilo de vida saludable con una alimentación adecuada y evitando tomar alcohol. Si tienes cálculos biliares, consulta a tu médico.
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