La arteriosclerosis afecta a millones de personas en todo el mundo. Se trata de una afección crónica y progresiva caracterizada por la acumulación de placa en las paredes de las arterias. Esta enfermedad es causada principalmente por la acumulación de colesterol, grasas, calcio y otras sustancias en las paredes arteriales. Con el tiempo, estos depósitos forman placas que estrechan y endurecen las arterias, impidiendo el flujo sanguíneo, lo que puede provocar diversas complicaciones de salud, como:
- Enfermedad coronaria: La acumulación de placa en las arterias coronarias puede provocar la obstrucción del flujo sanguíneo al corazón, lo que puede resultar en angina de pecho o incluso un ataque cardíaco.
- Accidente cerebrovascular: Si las arterias que suministran sangre al cerebro se ven afectadas por la arteriosclerosis, puede ocurrir un accidente cerebrovascular.
- Enfermedad arterial periférica: La arteriosclerosis en las arterias de las piernas puede causar una disminución del flujo sanguíneo a las extremidades inferiores, y provocar dolor o en casos graves, úlceras en las piernas o gangrena.
- Enfermedad renal: La arteriosclerosis en las arterias renales puede afectar la función rde los riñones y provocar enfermedad renal crónica o insuficiencia renal.
La prevención es crucial para controlar la arteriosclerosis. Adoptar un estilo de vida saludable, que incluya ejercicio regular, mantener una dieta equilibrada, dejar de fumar y controlar el estrés, puede reducir significativamente el riesgo de desarrollar la enfermedad. Además, es esencial vigilar y controlar la presión arterial, los niveles de colesterol y la diabetes.
