Los humanos llevamos milenios tomando leche de vaca y otros animales. Desde hace más de 10 mil años comemos queso. Los lácteos han acompañado a la civilización.
Estos son 5 datos por los cuales los lácteos siguen siendo relevantes en la alimentación de los niños:
1. Los lácteos son una excelente fuente de calcio, necesario para formar los huesos. El Instituto de Medicina de Estados Unidos ha establecido recomendaciones de ingestión de calcio durante el crecimiento:
• 1 a 3 años 700 mg
• 4 a 8 años 1,000 mg
• 9 a 18 años 1,300 mg
2. El calcio de la leche es mejor aprovechado por el cuerpo ya que tiene una mayor biodisponibilidad (el cuerpo lo absorbe con mayor facilidad) y muchos productos a base de leche están fortificados con Vitamina D, la cual mejora la absorción de calcio.
3. El calcio y la vitamina D también pueden ayudar a prevenir los dolores de crecimiento. Estudios realizados en años recientes han mostrado que los dolores relacionados con el crecimiento disminuyen significativamente cuando se mejora el consumo de calcio y vitamina D.
4. Científicos han encontrado que los lácteos, por sí mismos, son capaces de promover un mejor crecimiento lineal (aumento de estatura) en niños. Esto se debe a la calidad y cantidad de proteínas contenidas en la leche, que parecen potenciar el crecimiento.
5. En 2018, un estudio realizado en 136,000 personas de entre 35 y 70 años, en 21 países, encontró una presencia menor de eventos cardiovasculares en quienes consumen al menos una porción diaria de leche entera o un yogurt entero.
