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Síndrome del intestino irritable

Esta afección es bastante común, y se caracteriza por un dolor abdominal recurrente asociado a movimientos intestinales anormales. Por ejemplo, después de una comida, puede pasar la hora siguiente con cólicos y diarrea; o puede sentirse hinchado y constantemente estreñido. Algunas personas alternan entre heces sueltas y acuosas y heces duras y grumosas, que son difíciles de evacuar. Aun así, las deposiciones suelen proporcionar un alivio temporal del dolor o las molestias.

El Síndrome del Intestino Irritable (SII) suele denominarse trastorno funcional, lo que significa que los intestinos tienen un aspecto normal, pero funcionan de forma anormal. La causa es incierta. Algunas investigaciones indican que puede deberse a la hipersensibilidad del intestino, lo que le hace más sensible a ciertos alimentos, a la actividad física o a los gases normales del intestino. El estrés y otros factores psicológicos, como la ansiedad, también pueden contribuir al Síndrome del Intestino Irritable. Dado que otras afecciones más graves pueden producir los mismos síntomas, es importante consultar al médico, quien podrá realizar estudios para descartar otras afecciones.

Cambiar hábitos y rutinas diarias puede ayudar a aliviar sus molestias; por ejemplo, eliminar ciertos alimentos que parecieran empeorar los síntomas o buscar alternativas para el control del estrés. Una dieta saludable y el ejercicio regular también pueden ayudar a controlar el Síndrome del Intestino Irritable. El médico también puede recomendar un tratamiento farmacológico, si fuera necesario.

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