La lactancia materna es un proceso natural que brinda numerosos beneficios, tanto para el bebé como para la madre. Puede significar un momento único de conexión y amor entre una madre y su bebé; además, enriquece su sistema inmune, es de fácil digestión, previene alergias, infecciones respiratorias y gastrointestinales. La madre también se beneficia, ya que reduce el riesgo de hemorragias postparto y anemias, ayuda a perder los kilos adquiridos durante el embarazo y, a largo plazo, reduce el riesgo de cáncer de mama y de ovario.
Durante la lactancia, la mujer está pasando por cambios hormonales y físicos significativos, por lo que su interés en el sexo y su capacidad para disfrutarlo pueden variar respecto de otros momentos en su vida. Adicionalmente, la madre puede sentirse demasiado cansada por los horarios extenuantes, el cuidado del pequeño y la energía que requiere la producción de leche.
La lactancia y la sexualidad son aspectos separados de la vida de una mujer, y pueden coexistir de manera simultánea, sin embargo, existe mucha desinformación en torno a estos temas. Algunos datos importantes que debes saber son:
- Es falso que la lactancia reduzca el deseo sexual. No hay evidencia científica que respalde esta afirmación. Sin embargo, los cambios hormonales y emocionales, además del cansancio en este periodo, pueden afectar temporalmente el interés de la mujer en el sexo.
- La lactancia materna no es un método anticonceptivo eficaz; es cierto que proporciona cierta protección los primeros meses después del parto, pero no es un método anticonceptivo confiable. Si se quiere evitar un embarazo, es importante utilizar un método anticonceptivo que sea adecuado para esta etapa.
- Las relaciones sexuales no afectan la calidad o cantidad de leche materna, sin embargo, algunas mujeres pueden experimentar molestias o sensibilidad en los senos durante la actividad sexual.
- La lactancia materna no tiene por qué interrumpirse para retomar la actividad sexual. Es posible mantener una vida sexual activa mientras se amamanta, siempre y cuando ambos miembros de la pareja se sientan cómodos.
Es importante señalar que cada mujer es única, así como cada pareja, por lo que la experiencia será diferente en cada caso. Es importante que las parejas hablen claramente sobre sus necesidades y expectativas y que exploren opciones para mantener su relación sexual saludable y satisfactoria durante la lactancia. Esto podría significar ser más creativos, o reducir la frecuencia de los encuentros. Aunque para otras parejas, la lactancia puede aumentar su deseo sexual. Si tienes dudas consulta a tu médico.
