imagen del artículo Congelación de óvulos

Congelación de óvulos

La congelación de óvulos es un procedimiento que puede permitir a una mujer extender su fertilidad y mejorar las posibilidades de tener un embarazo sin problemas y un bebé sano. A partir de los 35 años disminuyen para una mujer las posibilidades de lograr un embarazo sin problemas y el nacimiento de un bebé saludable. Ya sea por motivos económicos o laborales, o por no tener una pareja en la actualidad, muchas mujeres están posponiendo el momento de buscar un embarazo, lo que da pie a la posibilidad de conservar sus óvulos, para intentarlo más adelante en la vida.

A medida que la mujer envejece aumenta la probabilidad de anomalías cromosómicas y, con ella, el riesgo de aborto espontáneo, malformaciones congénitas o trastornos que dificulten la concepción. La congelación de óvulos puede ser una manera de detener el reloj biológico y ampliar las opciones reproductivas.

Los problemas de salud también pueden ser un motivo para este procedimiento; algunos tratamientos contra el cáncer, por ejemplo, pueden ser tóxicos para los ovarios y provocar una menopausia prematura. Si una mujer desea ser madre, la congelación de sus óvulos previa al tratamiento puede ser una alternativa para preservar su fertilidad.

Lo recomendable es congelar los óvulos entre los 25 y los 35 años, pues es el rango de edad en el que las mujeres tienen gran cantidad de óvulos sanos. Después de los 35 años, la fertilidad decae en gran medida y los óvulos de las mujeres empiezan a perder calidad.

El proceso de congelación de óvulos, denominado criopreservación de ovocitos, a grandes rasgos es de la siguiente manera:

- Se estimulan los ovarios mediante la administración de medicamentos que promueven la maduración de múltiples folículos, donde se encuentran los óvulos.

- Bajo sedación y en un ambiente quirúrgico se realiza un procedimiento llamado punción ovárica o aspiración folicular, que consiste en la extracción de los óvulos de los folículos mediante una aguja guiada por ultrasonidos.

- Se seleccionan los óvulos que tienen una buena calidad y capacidad de fertilización, y después son sometidos a un proceso de vitrificación, que es una técnica de congelación rápida a muy baja temperatura.

- Cuando la mujer está lista para embarazarse, los óvulos son descongelados y fertilizados en un laboratorio para ser introducidos dentro de su útero.

Debes saber que este procedimiento no es económico, pero sí puede ser una alternativa para asegurar un embarazo y un bebé sano en el momento más adecuado.

También te puede interesar