El trastorno por restricción de la ingesta de alimentos, denominado ARFID por su abreviatura del inglés (Avoidant/Restrictive Food Intake Disorder), se caracteriza por ser una "alimentación extremadamente selectiva". Es un trastorno alimentario que afecta a miles de personas, especialmente niños. El significado de la aversión a la comida en los pacientes con ARFID difiere de quienes padecen anorexia o bulimia; para los pacientes con ARFID, este rechazo proviene de aspectos como:
- Falta de interés por la comida y los alimentos
- Desagrado a sabores, texturas, temperatura u olores en los alimentos
- Miedo a consecuencias como enfermedad, atragantamiento, náuseas o alergias
Algunas señales de alerta para el trastorno por restricción de la ingesta de alimentos son:
- Una lista corta de alimentos aceptables
- Comer alimentos de características similares, como por ejemplo de textura crujiente o colores claros
- Preferencias por algún método de preparación de los alimentos
- Evitar verduras, frutas o las fuentes de proteínas, como carne o leguminosas
- Eliminar alimentos o grupos de alimentos de la dieta
- En niños y adolescentes, escaso aumento de peso y crecimiento
- Carencias de nutrientes como hierro, vitamina A o vitamina C
- Nula disposición para probar alimentos nuevos o desconocidos
- Las limitaciones alimentarias tienen efectos negativos en la vida social del individuo
El trastorno por restricción de la ingesta de alimentos puede causar complicaciones de salud, especialmente en los niños, como aumento de peso y talla insuficiente, complicaciones gástricas, desnutrición y retraso en el desarrollo. Es muy importante buscar ayuda de especialistas que sepan manejar estos trastornos, ya que el tratamiento requiere de un manejo multidisciplinario.
