Una buena relación entre el médico y el paciente es esencial para ambas partes. Facilita al médico su trabajo, lo que hace posible un diagnóstico y tratamiento precisos y mantiene al paciente tranquilo, confiado y positivo ante un eventual problema de salud. Sin embargo, la realidad es que la mayoría de los doctores tiene poco tiempo para dedicarle a la consulta de cada uno de sus pacientes, por lo que es una extraordinaria idea prepararse antes de acudir a consulta, y así optimizar el tiempo dentro del consultorio. Aquí te doy algunas ideas que pueden resultarte útiles.
Prepárate antes de la visita:
Piensa las cosas que quieres hablar con tu médico, para que cuando llegue el momento seas lo más preciso posible. Haz una lista de los síntomas que presentas y de cuándo comenzaron, si están presentes todo el tiempo o sólo a ciertas horas del día o durante determinadas actividades, si algo los empeora, y todos los detalles. También debes ser muy honesto respecto de si has tomado algún medicamento o hecho algo para aliviar los síntomas. Toda esta información puede ser relevante para un diagnóstico correcto y un tratamiento adecuado.
Llega a tiempo a tu cita:
✔ Esto es importante, tanto para que tú estés relajado a la hora que te pasen a consulta, como para que el doctor haya revisado tu historial y tenga todo preparado para atenderte.
✔ Investiga acerca de lo que te preocupa con respecto a tu estado de salud, de modo que puedas formular todas las preguntas que tengas con ciertas bases. Recuerda que lo que puedas investigar de ninguna manera sustituye tu consulta médica, y que debes recurrir a fuentes confiables y reconocidas.
✔ Trae a tu pareja o a algún familiar cercano que pueda acompañarte y apoyarte, sobre todo si el problema de salud es serio. Él o ella te ayudará a recordar todos los detalles de los que hayan hablado, y a pensar con claridad en caso de malas noticias.
✔ Si estás en un tratamiento de medicina alternativa, como homeopatía o acupuntura, infórmale a tu médico.
✔ Haz una lista de los medicamentos que estás tomando y de los padecimientos que hayas tenido con anterioridad. Trae copia de los resultados de estudios que te hayan realizado.
✔ Si tu médico lo considera pertinente, puedes consultarlo por teléfono o correo electrónico, lo que, además de evitar un gasto, evita un traslado que quizá sea innecesario.
✔ Usa ropa cómoda, que te puedas quitar y poner fácilmente.
✔ Haz una lista de las dudas que tengas, para que no olvides preguntar todo lo que sea necesario cuando estés frente al médico.
✔ Cuando sea el caso, no olvides llevar los documentos necesarios de seguro médico, seguridad social u otros.
✔ Lleva algo para leer o algún entretenimiento para hacer mientras esperas. Si no, busca en el consultorio tu revista Medicable.
No olvides llevarla a casa.
En caso de ser tu hijo el paciente, recuerda las siguientes sugerencias:
✔ Nunca lo amenaces con llevarlo al médico o con una inyección. Cuando llegue el momento estará asustado y estresado.
✔ Háblale de cómo el médico es un amigo que nos ayuda a mantenernos saludables y de que las vacunas sirven para prevenir enfermedades graves.
✔ Lleva algo para que se entretenga mientras esperan ser atendidos.
