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Los ovarios

Dr. Miguel Ángel Guagnelli

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Desde que una bebé nace, su útero y ovarios están en su sitio, aunque inactivos. Cada ovario contiene aproximadamente 500,000 folículos primarios que en algún momento pueden dar lugar a un óvulo y además a formar estrógenos, una de las dos hormonas femeninas.

Durante la pubertad, la hipófisis anterior comienza a producir gonadotropinas: dos hormonas llamadas LH (hormona luteinizante) y FSH (hormona estimulante de los folículos). Ambas causan la maduración de los folículos, que comienzan a producir estrógenos.

Tras un periodo de maduración, los folículos comenzarán a liberar óvulos y aparecerá el periodo menstrual.

Habitualmente la ovulación se alterna: Un mes un ovario, el siguiente el ovario del lado contrario. A partir de entonces, cada mes dentro de un ovario se liberará un óvulo, los folículos producirán hormonas de forma regular y ocurrirá el sangrado del periodo, también llamado menstruación.

¿Qué es la menstruación?

La menstruación forma parte del ciclo menstrual, que es la preparación que, mes a mes, hace el cuerpo de una mujer para implantar un óvulo fecundado dentro del útero, y lograr un embarazo. El útero, por acción de las hormonas, genera en su interior un tejido esponjoso que se desecha si no hay un óvulo fecundado o si este no se implanta. Este tejido, llamado endometrio, se desprende y sale del cuerpo, dando lugar a la menstruación y posteriormente se renueva en el siguiente ciclo.

Normalmente la menstruación dura entre 2 y 8 días, y se presenta cada 21 a 35 días. Si la menstruación es muy abundante, si no se presenta con regularidad o si produce demasiado dolor o malestar, es importante visitar al médico.

Esas hormonas que producen los ovarios tienen que ver con el momento del ciclo en que se encuentre la mujer.

Durante la fase folicular las hormonas predominantes son los estrógenos. Su función biológica es preparar al útero para recibir un óvulo fecundado, pero también los estrógenos modifican el estado de ánimo: mejoran la vitalidad e incrementan el deseo sexual.

En un ciclo regular de 28/30 días la ovulación tiene lugar en el día 14/15.

Durante la fase lútea, una vez que se liberó el óvulo, los estrógenos disminuyen y el folículo se convierte en cuerpo lúteo o amarillo, que tiene la capacidad de producir progesterona. Esta hormona da cierta sensación de bienestar, pero también puede causar hinchazón.

Durante la fase folicular, los estrógenos causan el engrosamiento del endometrio, después de que termina de desprenderse el tejido residual de la menstruación anterior.

Después de la ovulación, en la fase lútea, una vez que se liberó el óvulo, la progesterona causa que el endometrio, ya engrosado por efecto de los estrógenos, se vuelva más complejo, aparezcan más vasos sanguíneos y ciertas glándulas que lo preparan para recibir al óvulo fecundado.

El cuerpo lúteo persiste durante 12/14 días. Si no hay embarazo, deja de producir progesterona, lo que causa que el endometrio se desprenda y llegue así el periodo menstrual.

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