En entrevista concedida a este medio, la licenciada Blanca Almeida nos habló de los desórdenes alimenticios. Nos dijo que básicamente son 2: la bulimia es cuando la persona come y después va a vomitar aquello que comió y la anorexia es cuando la persona deja de comer. Explicó que estos desórdenes tienen que ver con la idea, en este caso de las chicas, por lo general adolescentes, de que están muy gordas y quieren un método rápido para bajar de peso.
Advirtió que, como papás, tenemos que estar muy alertas con los diferentes signos que nos pueden decir que algo está sucediendo con la alimentación; lo primero es que de pronto tu hija no quiere comer cuando todos están comiendo, te dice constantemente que no tiene hambre y entonces evita estar durante la hora de la comida. También juega mucho con la comida, y en realidad no la come.
En otros casos, según dijo la especialista en psicoterapia, puede ser que coma mucho y después se levante inmediatamente de la mesa y se retire; eso quiere decir que va a ir al baño a devolver todo aquello que ha comido.
Añadió que de pronto podemos empezar a ver una pérdida de peso muy importante, que está muy delgada, empieza a notarse ojerosa, con mucho cansancio y tiene cambios de humor muy bruscos, comienza a haber mucho llanto, enojo. Si los padres detectan todo esto, lo mejor es ir a ver a un nutriólogo o a un psicoterapeuta, quien podrá ayudarle para cambiar la percepción que ella tiene de sí misma, ya que los desórdenes alimenticios pueden llevar a la muerte, concluyó la especialista.
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