En entrevista concedida a Medicable, el doctor Miguel Ángel Guagnelli nos habló de la relación entre la práctica de los deportes y el crecimiento de los niños.
El especialista en endocrinología pediátrica afirmó que se sabe que los deportes que implican saltos y estiramientos favorecen el crecimiento; el prototipo más común es el básquetbol, en el que los niños tienen que saltar y estirarse.
Explicó que los cartílagos de crecimiento son tejidos que se encuentran en los extremos de los huesos largos, y que no tienen nutrición sanguínea, entonces, al saltar, nadar o al estirarse, cada “golpeteo” ayuda a que le llegue más sangre al cartílago, como si fuese una esponja, y permite que crezca por más tiempo.
Añadió que también hay deportes que pueden frenar el crecimiento de los niños; actividades físicas demasiado intensivas, como la práctica excesiva de atletismo o incluso el ballet. En estos casos, en los que el “golpeteo” es demasiado intenso, sucede el efecto contrario, empieza a lastimarse el cartílago de crecimiento, de forma que va perdiendo su capacidad de crecer, concluyó el especialista.
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