La gimnasia olímpica integra una serie de ejercicios que incorporan fuerza, velocidad, potencia, coordinación, flexibilidad y equilibrio. Es un deporte exigente, ideal para que los niños practiquen, ya que otorga enormes beneficios, tanto a su salud como a aspectos de su desarrollo personal, favoreciendo disciplina, entrega, esfuerzo, competitividad y más.
Beneficios:
- Con la práctica regular de la gimnasia olímpica, los menores desarrollan una excelente coordinación física, elasticidad y fuerza.
- Además, introduce de manera muy efectiva la actividad física cotidiana como parte importante de su día a día.
- El riguroso entrenamiento de la gimnasia se centra en varios aspectos del deporte, desde el físico hasta el psicológico, lo que podrá sentar las bases físicas y psicológicas para la práctica de otras disciplinas deportivas.
- En edad preescolar ayuda a desarrollar mejor la noción del espacio y adquieren mayor equilibrio y reflejos.
- El aprendizaje y el entrenamiento le ayudan a desarrollar el espíritu deportivo en un ambiente de competencia sana.
- También les ayuda a perfeccionar sus habilidades sociales al interactuar con los adultos y con otros niños que se encuentran en diferentes niveles de competencia.
- La disciplina, la concentración, la dedicación y el esfuerzo son valores que también se integran en el aprendizaje de la gimnasia olímpica.
- La sensación de logro que obtienen al dominar las diferentes actividades fomenta la confianza y el sentido de la autoestima en los niños.
- Aprenden a enfrentarse a retos más importantes de forma metódica y a alcanzar sus objetivos.
- Aprenden a enfrentarse a sus miedos y a hablar abiertamente de ellos para poder encontrar la manera de superarlos.
- Les ayuda a ponerse objetivos y a trabajar arduamente para alcanzarlos.
- Desarrollan habilidades para gestionar el estrés y mantener la calma bajo presión.
- A todos los niños les gustan naturalmente las actividades que implican columpios, volteretas, saltos, maromas y caídas libres momentáneas. No hay muchas actividades tan estimulantes que hagan que los niños se sientan atraídos por ellas.
Algunos entrenadores sugieren que los niños comiencen alrededor de los 8 años a practicar la gimnasia olímpica, aunque hacerlo antes o después no es impedimento para que desarrollen todo su potencial.