Terapia efectiva para superar el trauma.
El EMDR es una terapia psicológica que se utiliza para ayudar a las personas a superar recuerdos dolorosos o traumáticos. Sus siglas significan Desensibilización y Reprocesamiento por Movimientos Oculares. Fue desarrollada en la década de 1980 y desde entonces se ha usado en todo el mundo, especialmente para tratar el estrés postraumático, aunque también puede ayudar con ansiedad, fobias o duelos complicados.
La idea principal del EMDR es que algunas experiencias difíciles quedan “atascadas” en el cerebro. No se procesan bien y siguen causando malestar, incluso muchos años después. Pueden aparecer en forma de miedo, pesadillas, angustia, pensamientos intrusivos o una fuerte reacción emocional ante ciertos recuerdos.
Durante una sesión de EMDR, el terapeuta guía a la persona para que recuerde el evento traumático de una manera controlada y segura. Al mismo tiempo, el terapeuta utiliza movimientos oculares (como seguir con la vista un objeto que se mueve de lado a lado), sonidos alternados o pequeños golpecitos en las manos. Estos estímulos ayudan al cerebro a “reprocesar” la experiencia.
El objetivo no es olvidar lo ocurrido, sino lograr que el recuerdo deje de causar dolor. Después de varias sesiones, muchas personas reportan que el evento sigue estando en su memoria, pero ya no genera miedo ni angustia. También pueden aparecer nuevas formas de entender lo vivido, con menos culpa y más autocontrol.
El EMDR es una terapia avalada por organizaciones internacionales de salud y es aplicada por psicólogos capacitados. No es invasiva, no usa medicamentos y se trabaja siempre al ritmo del paciente. Para muchas personas, ha sido una herramienta valiosa para sanar y avanzar en su vida.
